¿Cómo pedirle más a Babasónicos? Una noche espectacular desde el Auditorio Nacional
Hey zomba escucha esto, Babasónicos un estado en la mente y un viaje riquísimo de música, gozo y grandes clásicos. Tajada, A la izquierda de la noche y una joyita llamada Fizz abrieron el la noche en un Auditorio Nacional completamente lleno y con el ánimo a tope desde el inicio.
El siguiente turno en la lista fue para Adiós a Pompeya que fue el mayor acercamiento a los sonidos de esos cinco grandiosos discos que Babasónicos publicó en los noventa y que en esta ocasión no estuvieron presentes.
El show fue siempre en ascenso y con temas como Irresponsables, Tormento y El Colmo el coro fue ensordecedor y la complicidad entre la banda y sus seguidores se hizo imbatible.
Adrian Dargelos que sin duda es uno de los frontman más talentosos en la actualidad siempre es un show aparte con su voz, interpretación y sus peculiares pasos de baile que hacen aún más grandes los conciertos de Babasónicos en conjunto con los extraordinarios músicos que completan la banda.
Babasónicos tiene canciones para todo momento y las que tienen ritmo para bailar siempre están presentes como Bye Bye, Micridancing, Delectrico, La Lanza y La Pregunta.
También están esas románticas que se cantan a todo pulmón como Curtis que estuvo en las voces de Diego Uma y Mariano Roger, Putita que se llevó uno de los coros más altos del show, Carismático y Yegua que siempre son mágicas cuando suenan juntas como en quel disco titulado Anoche que la misma banda llegó a reconocer como su mejor trabajo.
En esta nota inauguramos la sección a la canción que se llevó la noche y daremos esta distinción a Rubí el aclamado tema número díez de Jessico, aquel disco de 2001 que marcó un antes y un después en la historia de la banda y que ocupa un lugar muy alto en la industria.
El momento fue el más seductor de la noche y sus lineas así lo hacen notar de inmediato: «imposible olvidar tu talismán, irresistible remar contra tu atracción, a ti lado retrocede el tiempo, cualquier día es el mejor momento, increíble tentación es el amor».
Sus notas suaves y contundentes hacen la combinación perfecta con la voz de Adrián que pasa por varios tonos como lo va requiriendo la canción y que lo llevan al momento más meloso y pasional, ese sentimiento que te provoca la persona a la que amas a primera vista y que dice: «Tengo el cuerpo hecho a medida de romance mi traje favorito es el amor, cariño mío acércate huelo a un jardín en primavera quizás mi cercanía sea tu hoguera, ¿Acaso mi mirada te encandila o miras debajo el cinturón?, quizás alguna vez pase a tu lado, no te hagas la tontita yo sé que lo has notado y algún suspiro al aire se ha escapado».
Ingrediente, Cicatriz #23 e ¿Y que? Fueron las encargadas de cerrar una noche espectacular que sin embargo dejó con ganas de más a sus seguidores.
Pero ¿Cómo pedirle más a Babasónicos? Que brindó un set de 29 canciones lleno de potencia, mucha calidad y entrega, repleto de increíbles momentos y canciones memorables.
La respuesta es muy sencilla, es una banda que tiene una excesiva lista de buenas canciones en 13 discos de estudio y más de 30 años de carrera.
Es indudable que se quiera escuchar siempre canciones como Mareo, El Loco, como eran las cosas, Flora y fauno, Natural, Valle de valium, Viva Satana, Los Calientes y la lista Podría seguir y seguir.
Lo cierto es que se agradece que una banda del tamaño de Babasónicos siga tan activa y creativa, seguramente ya se espera con ansias su siguiente visita a su casa que también ya es México.