Orígenes Mágicos del Centro Occidente de México
Los estados de Guanajuato, Jalisco y Querétaro guardan en su territorio, antecedentes de la historia de nuestro país, en cada uno de ellos se puede encontrar un origen mágico para compartir con amigos y familia.
En la tierra queretana, por ejemplo, Huimilpan tiene una historia de pasión, de dedicación familiar, de amor a la tierra; un fervor que se traduce en el sabor de sus quesos y de sus vinos.
El Pueblo Mágico de Amealco es asombroso porque en su vasto territorio, proliferan amplios bosques donde sus habitantes han sabido perpetuar su identidad indígena a través de sus usos y costumbres; no podrás dejar de visitar los paisajes que vieron nacer a la muñeca Otomí, símbolo que representa a México en todo el mundo.
Acámbaro es una pequeña y pintoresca ciudad en Guanajuato, su denominación proviene del purépecha “Akambarhu”, que significa ‘Lugar de Magueyes’. Esta mágica región se dedica principalmente a la agricultura y al comercio, pero es particularmente famosa por la producción del delicioso pan de Acámbaro, reconocido a nivel nacional.
Salvatierra es un encantador lugar al sur del estado de Guanajuato. Su riqueza natural y excelente ubicación motivó el asentamiento de distintas culturas prehispánicas. A la llegada de los españoles, comenzó el crecimiento del pueblo con bellas obras arquitectónicas como haciendas, templos y la traza urbana que le da su esencia.
Por otro lado, Yuriria es dueño de los más hermosos tesoros, tanto naturales como hechos por la mano del hombre. Su magna laguna artificial es considerada la primera obra hidráulica en América Latina y está acompañada por un monumental Convento Fortaleza construido por misioneros agustinos.
La historia de Valle de Santiago lleno de increíbles alrededores volcánicos, además de su arquitectura y acervo cultural, sorprende a sus visitantes con sus imponentes cráteres volcánicos conocidos como “Las Siete Luminarias”.
Finalmente, y no por eso menos importante, Guadalajara. Es considerada una de las ciudades más modernas de México, que a su vez ha logrado conservar tradiciones centenarias como son la charrería, el ya conocido baile folklórico, el mariachi y el tequila, emblemas que distinguen al país a nivel mundial.
Al llegar a la ciudad, debes disfrutar de su gastronomía, la cual la ha convertido en una de las más reconocidas a nivel nacional gracias a su gran variedad de platillos. La carne en su jugo es una de las joyas de la gastronomía tapatía, un guiso elaborado con bistec de res finamente cortado, macerado con jugo de limón y caldo de pollo, para después asar la carne en grasa de tocino previamente frito.
Además de disfrutar de la gastronomía, Jalisco cuenta con una gran variedad de lugares turísticos de diferentes temáticas como la zona arqueológica “Guachimontones”, espectaculares ruinas se encuentran en el municipio de Teuchitlán, a una hora de Guadalajara, y están conformadas por las únicas pirámides circulares en todo el mundo, un lugar muy concurrido para llenarse de energía. Además de actividades de aventura, senderismo, rapel, cañonismo, saltos al agua y toboganes naturales, los puedes encontrar en Las Cascadas de Comala, Chiquilistlán, Jalisco, tres impresionantes caídas de agua a solo dos horas y media de Guadalajara.
