Alucínate con Nosferatu
Estrena la esperada cinta de Robert Egger, Nosferatu, basada en la película homónima de 1922 del realizador alemán F. W. Murnau, y en el libro, Drácula, de Bram Stoker. Así, el mito del vampiro retorna a la pantalla grande con las detalladas y cuidadas imágenes de Egger, quien con producciones como La bruja o El faro ya había consolidado un estilo visual muy peculiar, plagado de un rico lenguaje fílmico con resultados óptimos en materia de crítica y taquilla.
La historia de Nosferatu es la ya conocida por los millones de fans del filme silente y del texto de Stoker, en torno a una malvada entidad que pretende conquistar Europa con su poder vampírico, el cual provoca los terrores más profundos en el alma humana. El actor Bill Skarsgard, reconocido por encarnar al payado Pennywise en Eso, se convierte en el Conde Orlock, un vampiro nada galán, por el contrario, espantoso en su actuar y en su físico. Si bien son pocos los minutos que aparece en pantalla, la presencia del Conde se deja sentir a lo largo de los 133 minutos que dura la historia, fascinando al más exigente de los gustos en torno a las tramas de chupasangre.
Además, Lily Rose Depp, quien da vida a Ellen (Mina en la obra de Stoker) resulta una sorpresa para la audiencia ya que consolida un personaje sumamente afectado por la dominación del vampiro y por sus propios apetitos sexuales, situación que la coloca en constante ruptura con su pareja, Thomas (Nicholas Hoult), estableciendo un espectral triángulo romántico. Por si fuera poco, uno de los actores fetiche de Eggers, Williem Dafoe, interpreta a Von Franz, el “Van Helsing” de Nosferatu, un médico más interesado en la mitología del vampiro que en su destrucción. Dafoe ya había sido parte de estos menesteres en La sombra del vampiro, interesante película sobre los misterios de la filmación del Nosferatu de Murnau. En dicha ocasión personificó a Max Schreck, el histrión que se convirtió en leyenda como el original Orlock de 1922.
Sin duda, Nosferatu es un remake impresionante, que realiza sendos homenajes al filme de hace 100 años y al Drácula de Francis Ford Coppola, sobre todo en materia de arte. Complementan el elenco caras conocidas como Aaron Taylor-Johnson, Emma Corrin y el otro actor fetiche de Eggers, Ralph Ineson.