Clínica Mayo y Médica Sur, una visión en conjunto sobre la optimización de recursos médicos y los retos del Gamma Knife en los Sistemas de Salud
A través de una conferencia de prensa, los doctores Alfredo Quiñones, jefe del Departamento de Neurocirugía de la Clínica Mayo, con sede en Jacksonville, Estados unidos, y Ramiro Del Valle, especialista y pionero en la implementación de radiocirugía dentro del hospital Médica Sur de la Ciudad de México, compartieron parte de su experiencia generada a través de la colaboración de ambas instituciones, así como los retos a los cuales se enfrentan los Sistemas de Salud en relación con el desarrollo del Gamma Knife y las oportunidades que desprende el uso de su conocimiento.
De acuerdo con ambos expertos en neurocirugía, la colaboración entre Clínica Mayo y Médica Sur, comenzada en 2013, ha permitido crear puentes sólidos, no sólo en materia de investigación y protocolos médicos con base en la tecnología del Gamma Knife, sino también, en la parte educativa, área en la cual, los residentes de ambas instituciones y distintos estudiantes, han tenido la oportunidad de desarrollar el aprendizaje de la radiocirugía y, además, entender el valor que representa el trabajo en conjunto de Médica Sur y Clínica Mayo.
En relación con la radiocirugía (Gamma Knife), Ramiro Del Valle explicó ser una tecnología donde se planifica el tratamiento desde una computadora (previo a tener los estudios de resonancia magnética, tomografías y/o cateterismo cerebral del paciente) y, en lugar de un bisturí, se utiliza energía radiante de rayos gamma, con las principales bondades de ser “de invasión mínima (el paciente no permanecerá en el hospital lapsos mayores de 24 a 36 horas), reducir en forma significativa la morbilidad (incidencia de complicaciones a partir del tratamiento) y lo que ello implica en costos” un proceso del cual podrían beneficiarse miles de personas.
También, el doctor Del Valle refirió la necesidad de generar una mayor conciencia sobre el costo-beneficio de la radiocirugía, con la intención de acercar la tecnología a más personas en el país y que todas tengan acceso a ella “ya sea desde la Secretaría de Salud o los distintos Sistemas públicos de la Seguridad Social instalados en México” así como la difusión de los beneficios de su conocimiento “esta tecnología tiene alrededor de 29 años y es muy desconocida. Existe un reto para difundir los recursos y sus bondades correspondientes, además de concientizar a las jefaturas de los programas de entrenamiento en general para participar en la formación multidisciplinaria de recursos humanos”.
Asimismo, el especialista Alfredo Quiñones estimó existir un promedio de 5 millones de personas a nivel global, quienes requieren alguna cirugía en el cerebro o columna (áreas dominadas por los neurocirujanos), sin embargo, de esas mismas personas dijo, no tienen acceso a un tratamiento como el implementado por él y el doctor Del Valle. De igual manera, previó la necesidad de 23 mil neurocirujanos en todo el mundo para atender las necesidades de los pacientes y, a partir de esas estimaciones, destacó la calidad de profesionales en formación de manera directa en México, un reflejo de la oportunidad en cuanto a la cantidad se refiere, de profesionales en desarrollo dentro de nuestro país.
A modo de complemento, el especialista Ramiro Del Valle comentó no existir alguna diferencia en cuanto a nivel competitivo relacionado con el campo de la neurocirugía entre México y el resto de los países de primer mundo al rescatar incluso el humanismo con el que se atiende “el paciente aún consulta a su médico especialista vía telefónica (número personal) las 24 horas todos los días. En ningún otro país pasa” y resaltó “no sólo es contar con el talento sino con la tecnología y que las personas tengan el acceso a ella. Hay que tomar en cuenta que las pólizas de seguros no están al alcance de toda la población (menos del dos por ciento de acuerdo con el neurocirujano).
Debido al análisis anterior, se vio como uno de los mayores retos el acceso a la tecnología del Gamma Knife dentro de distintos niveles de la Seguridad Social, en donde se recomendó llevar a cabo trabajos en conjunto con la iniciativa privada y pública para dar paso a la optimización de recursos, es decir a modo de ejemplo, si en algún centro hospitalario (independiente de ser del Instituto Mexicano del Seguro Social o Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado) se cuenta con un equipo médico disponible debido a la alta demanda a comparación del otro, se dé la autorización para que quien lo requiera, lo utilice. Un tema donde a pesar de algunas iniciativas ya planteadas, se han dado trabas en lo político y administrativo, concluyó el doctor Del Valle.
Dentro de un análisis sobre los signos de alarma para prevenir complicaciones en el campo de la neurocirugía, los especialistas recomendaron «ante la presencia de crisis convulsivas; dolores de cabeza inusuales; síntomas relacionados con antecedentes en la sensibilidad y movimiento, pueden estar relacionados con lesiones estructurales del Sistema Nervioso. No hay que dudar en ir tempranamente con un médico especialista».
Médica Sur y Clínica Mayo
En la parte final de la conferencia, el doctor Ramiro Del Valle solicitó entender a la Clínica Mayo como un sistema encabezado por sus tres sedes en Rochester, Phoenix, además de Jacksonville, y expuso que Médica Sur entró como la primera institución fuera de Estados Unidos en formar parte como miembro del Mayo Clinic Care Network, lo cual requirió un largo recorrido antes de cumplir con los estándares de calidad planteados por la institución norteamericana y que impacta en la atención de los pacientes.
En otro de los beneficios, el neurocirujano señaló la E-Consult (consulta en línea) dedicada a la optimización de la atención de los pacientes entre ambas instituciones para esclarecer dudas y, desde la parte asistencial, el acceso a especialistas por parte de los propios pacientes para una consulta inicial realizada por personal de Médica Sur, un reflejo de la filosofía y lema de la institución “humanismo, calidez y calidad humana”.
Otra manera de fortalecer las relaciones entre ambas instituciones y reconocer el talento de los profesionales originarios de México, concluyó el doctor Quiñones, es su caso personal, al ser reconocido con el más alto grado de distinción como uno de los cuatro profesores catedráticos por parte de la Clínica Mayo dentro de una estructura conformada por 95 mil empleados en Estados Unidos.
Según reconoció el doctor Quiñones, «el mexicano que trabaja en Clínica Mayo juega un papel muy importante. Pienso que es una cultura de colaboración. La institución tiene esa historia en la cual, los hermanos Mayo salieron a aprender a otras partes del mundo y regresaban e implementaban el aprendizaje. La institución siempre ha estado abierta al multiculturalismo, la diversidad de ideas, religiones y gente».
A modo de breviario cultural, se reveló que el primer viaje documentado por parte de uno de los hermanos Mayo a México, se realizó en 1921, donde se cuenta con una foto dentro de los archivos históricos de la institución como muestra del intercambio de visitas que se han dado desde esas fechas y continúan al día de hoy, con los distintos profesionales y médicos especialistas que colaboran ahora con el fortalecimiento de Médica Sur y Clínica Mayo, un reflejo del trabajo día con día.