Un auto impecable: vital entre los amantes del automovilismo
Desde la creación del primer auto por allá en 1886, la historia de esta máquina para transportarnos ha evolucionado mucho más allá de sus funciones. El amor por la adrenalina inició un nicho grandísimo y los amantes de los autos y las carreras son hasta hoy, una increíble afición.
La pasión por la velocidad originó lo que hoy conocemos como automovilismo. En principio por puro entretenimiento para aquellos que podían darse el lujo de adquirir un auto y casi meramente por exhibición, como lo fue en su momento, el Rally de Montecarlo y más tarde nació también la famosísima Fórmula 1.
De ahí han surgido infinidad de competiciones y premios y sin duda el gran protagonista ha sido siempre uno: el auto; ese que ha revolucionado la historia y que, en su evolución, nos sigue sorprendiendo.
Sabemos que tú también eres un gran aficionado a los autos, y si algo tienen en común los grandes pilotos, es el cuidado que dedican a sus vehículos. Tal vez no tengas en casa un flamante Formula 1, pero para ti tu propio automóvil significa tanto.
Y, si algo hay en común es que tanto los grandes pilotos como tú cuidan su auto a un nivel máximo, por eso, te recomendamos dos productos de Armor All que los mejores pilotos, como Checo Pérez, utilizan para mantener su auto impecable:
El protector original, es de fácil aplicación y protege tanto el interior como el exterior de tu vehículo contra rayos UV, ayuda a prevenir el agrietamiento, la decoloración y el envejecimiento. Limpia la suciedad, el polvo y los residuos dentro de tu auto. Renueva y revitaliza el vinilo, la goma y el plástico.
La cera líquida, que brinda ese acabado profesional de alto brillo. Fortificado con caranuba auténtica de Brasil actúa como repelente para agua y suciedad manteniendo intacta la pintura del auto. Su aplicación no requiere de mayor esfuerzo, se esparce rápido y no deja residuos.
Con estos productos de Armor All puedes llevar tu afición al límite y mantener tu auto como de campeonato, en la comodidad de tu propia cochera.
