No te pierdas de la puesta en escena de ‘Carnales’
Todo comienza de manera casual aparentemente. Cinco amigos con más de 30 años de no verse llegan a un bar modesto y hasta sucio, atendido por un viejo barman que trata con demasiada cortesía y confianza a los invitados, que conforme van llegando se sorprenden de haber sido convocados a semejante lugar.
Además de la edad, entre 40 y 50 años, los amigos tienen algo en común, un lazo muy fuerte que los llevó a reencontrarse en esa vetusta cantina, todos fueron niños abandonados en un orfanato donde padecieron terribles vejaciones por el director, un tal Ojeda que no aparece más que en las menciones de los jóvenes, que los unió como grupo al que llamaron “Carnales” para defenderse y aprender de los golpes de la vida. Otra característica que los identificó más fue que ninguno pudo ser adoptado, asi que conforme cumplieron la mayoría de edad fueron saliendo del orfanato para integrare a la sociedad, algunos con éxito, otros menos afortunados.
Pese a las adversidades los carnales sobreviven, cada uno por su lado tratan de superar los traumas de infancia, lo que no consiguieron, pues esa noche del reencuentro no pueden evitar que salgan a flote los fantasmas del pasado, los rencores, entre bromas y reclamos que van subiendo de tono hasta descubrirse la verdad de sus orígenes, del por qué llegaron al orfanato y del por qué son como son.
Gonzalo (Ricardo Reynaud) es el primero en llegar al bar y el más discreto del grupo; Raúl (Alberto Casanova) es un eminente Ginecólogo; Rafael (León Michel), otro profesionista próximo a ser padre por primera vez; Iván (Roberto Castañeda) está enamorado de Carlota, que resulta ser Horacio (Aarón Balderi) un homosexual travesti que se descara ante todos al iniciar el segundo acto y lo más sorprendente es conocer la identidad de Don José el cantinero, en el desenlace de la historia, que rompe con cualquier predicción del público.
Sobre la puesta en escena habla su director, José Acosta, “Hace más de un año Tito Casanova me invitó a dirigir esta obra. Leer el texto fue conmovedor y perturbador. La ficción de la obra encara de una forma salvaje, aspectos de la condición humana que no son fáciles ni agradables, pero si reales y cotidianos. Y la esencia de la obra se vive, no solo en México sino en todo el mundo de formas emocionales, psicológicas y sexuales”.
El final impredecible deja una honda huella de reflexión y el ánimo de ser más responsables de la educación de los hijos que son los menos culpables de los errores de sus padres.
La comidilla
En la función de estreno en el teatro Rafael Solana, se reunieron diversos artistas, amigos también la mayoría compañeros en Tv Azteca, como Mayra Rojas, que luce espectacular; Roberto Sosa, muy tranquilo y hasta discreto, acompañado de la primera actriz Evangelina Martínez; Vanessa Acosta, joven madre, pareja de Alberto Casanova, ambos egresados del Cefac Azteca, entre otras figuras de la televisora del Ajusco, excepto Laura Zapata que como buen “ajonjolí de todos los moles” se hace presente en cuanto jolgorio teatral o artístico se presente, con su habitual chispa y elocuencia para hablar lo mismo de problemas domésticos como los precios de los tinacos, que de las excentricidades de otros famosos o algún proyecto en eterna espera.
La madrina de la temporada, Bárbara de Regil, confesó sentirse “cómodamente chingona” después de ver la obra, por su ensamble trascendente y procedió a darles la “patadita” de la buena suerte a todo el elenco.
“Carnales” se presenta todos los jueves a las 20:30 horas en el Teatro Rafael Solana del Centro Cultural Veracruzano, al sur de la ciudad de México.