Brad Pitt y APXGP rumbo a la victoria en taquilla con ‘F1’
Luego de un gran esperra llega a las pantallas nacionales una de las películas más esperadas del año, ‘F1’ protagonizada por Brad Pitt, Damson Idris, Kerry Condon y Javier Bardem, que lleva a un viaje a toda velocidad por las entrañas de la Máxima Categoría, mezclando una historia ficticia con los sentires, prácticas y estrategias que se usan en la vida real en la Fórmula 1.
Dirigida por Joseph Kosinski, que cuenta en su historial con filmes como Top Gun: Maverick, adentra al espectador a ver prácticamente lo que un verdadero piloto de F1, visualiza dentro de un auto.
La historia, aunque es una clásica narración de segundas oportunidades y redención, la ambientación la convierte en algo sumamente atractivo que eleva la adrenalina tal y como sucede cuando se disfruta de una fecha de la F1.
Se centra en un veterano piloto llamado Sonny Hayes (Brad Pitt), que en sus primeros años, fue una promesa con talento especial que se perfilaba como un gran campeón, pero un accidente echó por los suelos sus sueños y fue de más a menos durante años.
Esa caída lo convirtió en un mercenario de las pistas donde a pesar de ser huraño y amargado, trataba de cumplir y volver a sentir esa libertad que le daba correr en sus inicios.
Justo tres décadas de su paso por la F1, uno de sus ex compañeros de carreras, Rubén Cervantes (Javier Bardem), lo contacta para ofrecerle una oportunidad única, regresar al máximo circuito y así poder ayudarlo a mantener el control del joven equipo llamado APXGP.
Aquí es cuando el clavado al mundo de la F1 se pone interesante, se retrata la presión, los juegos de intereses, las traiciones, ambiciones y el juego de aprendizaje que se vive en el campeonato todos los años.
Hayes, un viejo lobo de las pistas sabe perfectamente las reglas de la F1 y hace todo lo posible para ayudar al equipo a ganar sus primeros puntos y tratar de ganar su primer Gran Premio, sin detenerse en las consecuencias valiéndose de las lagunas en las reglas de la FIA para la F1.
Hay momentos que recuerdan algunos trucos estilo Flavio Briatore, que utilizó Sony para que su coequipero, Joshua Pearce (Damson Idris), lograra esos puntos deseados, y aunque en un principio, su orgullo, la poca humildad (véase Liam Lawson, Lando Norris), lo dominan, la eficacia de Hayes se gana el respeto de Pearce y luego ambos forjan una buena dupla que ayuda a APXGP.
Las cámara a bordo, los juegos en los pits, el gran trabajo del departamento de diseño y desarrollo de los autos se ve reflejado en este filme que parece pretender evangelizar a los fans y no fans de la F1, sobre lo que conlleva estar dentro del campeonato y que no solo es subirse al auto y manejar sentados por dos horas dando vueltas a un circuito.
Otro de los aciertos son los guiños a los verdaderos protagonistas de la F1, la mayoría de ellos salen en diversas acciones, pero quienes destacan más son “Checo” Pérez, con quien Sony tiene grandes duelos en pista, Max Vertappen, que ante una maniobra un tanto cuestionable de Hayes, el holandés le hace una Britney señal, además de claro, Lewis Hamilton, quien será su mayor rival y que en este filme funge como productor a lado de Jerry Bruckheimer.