Te decimos 5 reglas de oro del motociclista responsable
Cada día se suman más motociclistas que ruedan por calles, avenidas, carreteras y caminos. El crecimiento de las motos es exponencial, pues no solo es un medio de transporte, es una pasión que brinda libertad, independencia, empoderamiento e, incluso, economía para millones de familias mexicanas.
Desplazarse con mayor fluidez, diversión y emoción va de la mano de medidas preventivas y conducción responsable. ITALIKA busca crear seguridad y armonía entre la comunidad motociclista, es por eso que te compartimos cinco reglas de oro que todo piloto debe seguir para disfrutar al máximo su experiencia.
1. Protección ante todo
El casco certificado es la mejor inversión de un motociclista, algunas de las certificaciones más comunes son DOT (americana) y ECE (europea). Acompañarlo con guantes, chamarra, botas y protecciones adecuadas no es un lujo, es una medida básica de autoprotección.
2. Respeta los límites de velocidad y el entorno
Cada camino cuenta su propia historia: baches, tráfico, condiciones climáticas. Conducir con velocidad moderada no solo permite disfrutar más el camino y el paisaje, también te da la tranquilidad de viajar sin prisas con un mayor control de la moto.
3. Atención plena en cada kilómetro
Conducir una moto es una experiencia que se disfruta más cuando ponemos toda nuestra atención en el camino. Mantenernos enfocados, evitar distracciones y manejar con calma nos ayuda a reaccionar mejor ante cualquier imprevisto y a llegar seguros a nuestro destino.
4. Hazte visible
Un motociclista responsable entiende que tiene que hacerse visible en todo momento. Circular con luces encendidas, utilizar ropa reflectante, evitar puntos ciegos y mantener una posición clara en el carril son prácticas vitales para evitar accidentes.
5. Mantenimiento constante
La seguridad también se construye en el taller. Revisar frenos, llantas, presión de aire y sistemas eléctricos antes de cada recorrido es una rutina que garantiza que la moto esté siempre lista.
ITALIKA cree que un motociclista responsable contribuye a la seguridad vial y a una mejor convivencia en las calles, porque cuidarnos en la moto es también cuidar de todos.
