Conquista y brilla una vez más el Festival “Ibérica Contemporánea” con la danza y el flamenco
*Concha Jareño le hace un cariñoso guiño a la cultura mexicana con un vestuario, reivindicando la hermandad entre México y España
El apoyo ofrecido por personas e instituciones han contribuido en la realidad de la que hoy podemos hacer testimonio, comentó Adriana Covarrubias, directora general del Festival Internacional de Danza Ibérica Contemporánea.
Hacienda Casa Vegil, de Joaquín Tamayo, fue el hermoso escenario que sirvió de marco y que, en un emotivo discurso de cierre a la noche, agradeció la Lic. Adriana Covarrubias, directora y gestora de este reconocido festival, por sumarse al desarrollo del arte en Querétaro.
“Este festival se puede lograr gracias a muchísima gente que se suma y que han creído en el proyecto, al apoyo del gobierno como la Secretaría de Cultura, Secretaría de Turismo que siempre nos han abrazado. A los artistas que vienen con mucha pasión y otros que han sido embajadores de Ibérica desde el inicio como el Mtro. Manuel Segovia y Mtro. Cristóbal Reyes, María Juncal, Juan Paredes, que han sido pieza clave en este crecimiento de Ibérica, y quienes nos ayudan en la curaduría”, comentó Covarrubias.
Los asistentes disfrutaron de un espectáculo de flamenco de verdadero lujo, compuesto por los bailaores Concha Jareño y José Manuel Álvarez, el cante de Galli y Jesús Corbacho, la guitarra de Jose Almarcha y la percusión de Bandoleroa.
Abren José Manuel Álvarez con Farruca, sigue Concha Jareño con Verdiales, para dar paso a una pieza musical de transición antes de la aparición de José Manuel Álvarez que interpreta Solea por Bulerías. El cierre es por Alegrías con mantón de Manila y bata de cola por parte de Concha Jareño.
Se trata de dos bailaores muy distintos, pese a ser dos grandes de este arte. Y, aun así, defienden conceptos muy parecidos del baile flamenco. Y en ambos casos les resulta muy fácil llenar el escenario con ese respaldo musical compuesto de tan extraordinarios profesionales. Corbacho y el Galli han coincidido muchas veces en los escenarios y demuestran un entendimiento sorprendente y, por otro lado, Almarcha, que, con su inspiración y su profesionalismo, contribuye de forma decisiva a la buena marcha del espectáculo.
Por otro lado, merece la pena indicar que Concha Jareño ha hecho un cariñoso guiño a la cultura mexicana con su vestuario inicial reivindicando la hermandad natural entre México y España, lo que los asistentes han sabido agradecer con sus aplausos.
La gran pregunta es qué tiene Querétaro que los artistas, al subir a sus escenarios desarrollan detalles y abordan aventuras que habitualmente no incorporan en sus actuaciones regulares…
Eso es lo que hemos podido apreciar esta noche, y eso mismo es lo que los artistas más agradecen a este festival que les permite expresarse de una forma tan especial…