Inocuidad alimentaria, ¿cómo evitar las enfermedades transmitidas por los alimentos?
Bajo el slogan “la inocuidad de los alimentos es un asunto de todos”, el próximo 7 de junio se conmemorará el Día Internacional de la Inocuidad Alimentaria, con el objetivo de recordar a la industria alimentaria que debe incrementar los esfuerzos destinados a garantizar que los alimentos estén libres de contaminantes, incorporar las buenas prácticas de limpieza y desinfección a la agenda pública, para así reducir los casos de enfermedades transmitidas por los alimentos a nivel mundial.
Con base en información de la Organización Mundial de la Salud (OMS), los alimentos insalubres que contienen bacterias, virus, parásitos o sustancias químicas nocivas, causan más de 200 enfermedades, que van desde la diarrea, problemas en el crecimiento y desarrollo, deficiencias nutricionales y mentales, hasta cáncer.
Una gran variedad de alimentos puede ocasionar Enfermedades de Transmisión por Alimentos (ETA’s): las carnes crudas y embutidos (aves, res o cerdo), los productos lácteos sin pasteurizar, pescados y mariscos, frutas y verduras, pueden contaminarse durante su manejo debido a malas prácticas. Las conservas mal esterilizadas también pueden ocasionar ETA’s.
Los microorganismos perjudiciales para la salud más comunes que afectan al ser humano por la ingesta de alimentos contaminados son: Salmonella, E-coli, Staphylococcus aureus y Listeria monocytogenes.
Esteripharma, empresa mexicana comprometida con la innovación, tecnología, desarrollo e investigación de productos sanitizantes y desinfectantes de alto nivel, a través de su División Agroalimentaria, recomienda el uso de sus Soluciones Electrolizadas de Superoxidación (SES) con pH neutro, para contribuir a alcanzar la inocuidad dentro de la industria de producción de alimentos.
“Innovadores productos sanitizantes y desinfectantes con amplio espectro microbiano como las SES favorecen en gran medida la inocuidad alimentaria porque inactivan microorganismos patógenos y previenen su diseminación, evitan la contaminación cruzada y promueven las prácticas de prevención en materia de limpieza y desinfección. No son tóxicas ni corrosivas y son amigables con el medio ambiente. Además, también ofrecen opciones enfocadas en favorecer la frescura de los alimentos, sin alterar sus propiedades nutricionales y de calidad”, explica el químico en alimentos Andrés Rivera García.
Para la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), las buenas prácticas de manipulación de alimentos que deben implementarse en los establecimientos, bodegas, medios de transporte y, en general, en todos los lugares en donde se almacenen o preparen alimentos son:
- Contar con condiciones de temperatura ideales para la conservación de cada tipo de alimento.
- Verificación de fechas de vencimiento de alimentos.
- Buen uso y correcto almacenamiento de sustancias usadas para la limpieza y la desinfección.
- Se deben mantener limpias y desinfectadas todas las superficies en contacto con alimentos, incluyendo las manos del personal.
- Se deben tomar las medidas preventivas necesarias para evitar la aparición de plagas.
- Retirada de la basura y los residuos.
- Limpieza y desinfección de vajillas, utensilios de cocina, cristalería, loza, bandejas y, en general, de todos los elementos en donde se preparen y se sirvan los alimentos.
Es responsabilidad de todas las personas que entran en contacto con los alimentos a lo largo de toda la cadena de producción, recibir capacitación sobre buenas prácticas de manipulación de alimentos y sensibilización sobre el cuidado a la salud y el bienestar de los consumidores.